¿QUE ES ARREBATAMIENTO?


1 Tesalonicenses 4:16-18 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras.



sábado, 12 de noviembre de 2011

CIELO O INFIERNO?

Hay dos lugares preparados en el universo. Uno es el cielo, el cual se está preparando para que el Señor viva con sus seres amados. El otro lugar es el infierno, el cual se ha preparado para el diablo, sus demonios y todos esos que rechazan la amable invitación que Dios ofrece de salvación a través de su Hijo, Jesucristo. Juan fue muy claro cuando declaró que
" los cobardes, los incrédulos, los abominables, los asesinos, los que cometen inmoralidades sexuales, los que practican artes mágicas, los idólatras y todos los mentirosos recibirán como herencia el lago de fuego y azufre. Esta es la segunda muerte" (Apocalipsis 21,8). En caso de que alguien no preste atención, y porque esto es tan serio, Juan repite la advertencia: " Pero afuera se quedarán los incrédulos, los que practican las artes mágicas, los que cometen inmoralidades sexuales, los asesinos, los idólatras y todos los que aman y practican la mentira " (Apocalipsis 22,15).
A fin de comprender más completamente las palabras de Juan, considere por un momento el contraste entre los dos lugares:
El cielo es un hogar donde no hay más sufrimiento, ni muerte, ni lamento, ni llanto, ni dolor (Apocalipsis 21,4). El infierno es un hoyo donde hay un gran sufrimiento, llanto y rechinar de dientes.
(Mateo 13,50)
. El cielo es un hogar donde hay absoluta seguridad y eterna protección dentro de sus altas y gruesas murallas (Apocalipsis 21,12-17). El infierno es un hoyo que se describe como el abismo o un pozo sin fondo (Apocalipsis 20,3).
El cielo
es un hogar estable, inquebrantable e inamovible, con doce cimientos (Apocalipsis 21,14). El infierno es un hoyo que ondula y cambia como la inestable superficie de un lago (Apocalipsis 20,10).
El cielo
es un hogar en el cual no hay más noche ni tinieblas (Apocalipsis 21,25). El infierno es un hoyo de total oscuridad donde el sol nunca sale, ni llega la luz (Mateo 25,30). ¿Ha escuchado a la gente decir que desean ir al infierno a fin de poder estar con sus amigos ? Pues bien, quizá sus amigos estén allí, pero nunca se verán porque es totalmente oscuro.
El infierno
es un hoyo lleno de fuego que provoca sed y tormento sin fin y ardiente descontento (Apocalipsis 20,15). El cielo es un lugar donde serviremos a Dios y veremos su rostro ( Apocalipsis 22,14).
¿Cielo o infierno ?
La decisión es suya.

Casa de oracion.

CARTA A LAS IGLESIAS DE EFESO, ESMIRNA, PERGAMO (AP.2)

Los capítulos 2 y 3 del Apocalipsis se refieren a siete cartas que son mensajes dirigidos a siete iglesias históricas que existían en el Asia Menor y en las que Juan el Apóstol tuvo un amplio ministerio. Dichas iglesias, además, representaban siete condiciones que han existido simultáneamente cada siglo de la historia de la iglesia. Las cartas contienen, por lo tanto, exhortaciones, advertencias, recriminaciones y reconocimientos que pueden y deben aplicarse a las iglesias de hoy día.

1) Mensaje a la Iglesia de Éfeso: (2,1-7). La iglesia que perdió el primer amor. Significa deseo ardiente, lleno de celo evangelizador. Fue fundada por el apóstol Pablo en su tercer viaje misionero (Hechos 19). Éfeso era sana en doctrina y perseveró bajo la adversidad. Ni el mundo ni la persecución eran el problema. Esta iglesia era notoria por su impulso hacia Dios, su fervor, su celo doctrinal. Fue una iglesia misionera durante su generación. A pesar de sus virtudes abandona su amor inicial por Cristo, y el Señor le advierte de regresar a su relación original. Hoy día, muchas
iglesias pese a su celo doctrinal y trabajo sufren de un enfriamiento espiritual que afecta su vida diaria.

2) Mensaje a la Iglesia de Esmirna: (2,8-11) La iglesia pobre en lo material, pero rica en lo espiritual. Significa mirra. La mirra es amarga. Sufrió grandes amarguras, persecuciones y miles y miles de martirios. Una iglesia pequeña, pobre en recursos materiales, a pesar de encontrarse en un ambiente de opulencia económica y de esplendor sociopolítico. Los creyentes de Esmirna eran perseguidos y acusados ante las autoridades romanas por un grupo de judíos a quienes Juan describe como sinagoga de Satanás, pero no claudicó en su esfuerzo por anunciar a Cristo

3) Mensaje a la iglesia de Pérgamo: (2,12-17). La iglesia que se casó con el mundo y el estado político y estaba implicada en prácticas que desagradaban a Dios. Cristo elogia su firmeza, pero reprende sus faltas pecaminosas Tolera las inmoralidades, la idolatría y las herejías. Hace amistad con Satanás. Trono de Satanás.

4) Mensaje a la iglesia de Tiatira: (2 18-29). La que entra en la oscuridad-apóstata. Poseía ciertas excelencias envidiables como amor, fe, servicio y paciencia. Es reprochada por tolerar la idolatría y la inmoralidad. También hay prácticas de ocultismo capitaneadas por una mujer.

LA REVELACION DE CRISTO GLORIFICADO (AP.1

El Apocalipsis es uno de los libros que menos se comenta en nuestra iglesia, por eso mismo, se tienen ideas muy vagas y hasta fantasiosas de este libro con el que se cierra la Biblia. Son muchos los que le tienen miedo al Apocalipsis porque, frecuentemente, han oído hablar de él como de un libro de terror, al que sólo pueden tener acceso los especialistas en la Biblia. Cuando Jesús proporcionó las revelaciones a Juan, su intención era que todos conocieran este libro. Por eso, expresamente, le ordenó a Juan que “no lo sellara” (Apocalipsis 22,10), es decir, que lo difundiera ampliamente. Jesús quería que todos los cristianos se empaparan del mensaje del Apocalipsis.

La palabra griega Apocalipsissignifica “revelación, retirar un velo para revelar y ver lo oculto y escondido”. Y por revelación entendemos, de acuerdo al Diccionario Bíblico, la declaración o comunicación extraordinaria y sobrenatural hecha por Dios, de aquellos acontecimientos y verdades que el hombre no alcanzaría a entender ni a vislumbrar por facultades naturales.


El libro de Apocalipsis promete bendiciones muy grandes para la persona que lo lea y obedezca las palabras de esta revelación: “Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca”. (Apocalipsis 1,3). Por esa razón, es que no incluyo muchas citas Bíblicas, porque mi deseo es que usted lea cada capítulo del libro. De hecho, te van a quedar muchas dudas, porque el espacio que utilizó es muy breve, pero, si al menos, usted leyera el Apocalipsis, y reciba las bendiciones que el Señor prometió, me daré por satisfecho y bendeciré a Dios de todo corazón.

El primer capítulo del Apocalipsis descorre las cortinas de la revelación divina para descubrir ante los ojos del lector la persona gloriosa del Señor Jesucristo.

Juan describe al Cristo glorificado de la cabeza a los pies. Se afirma de manera contundente la realidad de su segunda venida. Los evangelios presentan al Cristo que vino para servir, no para ser servido (Marcos 10:45). El capítulo uno del Apocalipsis presenta a Cristo digno de toda adoración, el Juez del universo delante de quien toda rodilla se doblará. El es el Soberano del universo, el Todopoderoso, Aquel que tiene control absoluto de todas las cosas y que vendrá de forma: (l) Literal; (2) visible; (3) universal; (4) judicial (5) glorioso.
Casa de oracion.